Luna Joana, una bebé de tan solo cuatro meses, desapareció mientras estaba en los brazos de su tía María Isabel. La pequeña había salido junto a su madre, Rosa Isela, y su hermanito, pero en algún momento se separaron, y desde entonces, no se sabe nada de su paradero. Esta desaparición se suma a la alarmante cifra de personas desaparecidas en el Estado de México, motivo por el cual se realizó una misa conmemorativa en el marco del “Día Internacional de los Desaparecidos”.
Rosa Isela Esquivel Gómez, madre de la bebé, y su esposo Emmanuel Vicente Ovando Álvarez han solicitado el apoyo de las autoridades para encontrar a Luna Joana y a su tía, María Isabel, quien también es madre de familia y es esperada por sus hijos en casa. Rosa Isela relató cómo su hermana la acompañó al centro de Almoloya para hacer unas compras. María Isabel llevaba a la bebé, mientras que ella se encargaba de su otro hijo y algunas pertenencias. "Nos separamos para comprar algunas cosas y quedamos en encontrarnos en un punto, pero ella nunca llegó. Le marqué a los cinco minutos, y su teléfono ya estaba apagado", explicó con desesperación.
Pese a los esfuerzos de la familia por acceder a las imágenes de las cámaras de seguridad de la zona, las autoridades les han negado el acceso bajo el argumento de que no han presentado la documentación necesaria para la revisión del material correspondiente al día de la desaparición.
Emmanuel Vicente, padre de Luna Joana, confesó que los últimos días han sido una pesadilla para la familia. La incertidumbre y el temor han robado el sueño de ambos padres, quienes viven con la constante angustia de no saber el paradero de su hija y cuñada. "Le suplico a las autoridades que nos apoyen, no solo por mi hija y mi cuñada, sino por todas las personas desaparecidas. La desesperación es inmensa, quiero buscarlas por todos lados, pero no sé dónde más mirar", expresó con voz quebrada.
Ante la falta de respuestas, la familia ha recurrido a la comunidad para pedir ayuda en la búsqueda de María Isabel, con la esperanza de que esto pueda llevar al rescate de la pequeña Luna Joana. En un gesto de fe y desesperación, el matrimonio participó en la misa por los desaparecidos, celebrada en el Centro de Toluca, donde encendieron una veladora al Divino Niño, implorando por el regreso seguro de su hija y su tía.
Durante la ceremonia en la Iglesia de la Santa Veracruz en Toluca, colectivos y familiares de otras personas desaparecidas o no localizadas en el Valle de Toluca se unieron en oración y exigieron a las autoridades avances concretos en las investigaciones. Según cifras federales, en los primeros seis meses del año, el Estado de México ha registrado casi tres mil 500 desapariciones, concentrándose la mayoría de los casos en municipios como Ecatepec y Naucalpan. La comunidad, unida por el dolor y la esperanza, sigue pidiendo justicia y el regreso de sus seres queridos.