AFP
Más de 20,000 personas huyeron de los enfrentamientos interétnicos que sacuden el noreste de India y que habrían causado decenas de muertos, anunció el ejército el domingo.
Los enfrentamientos en el estado de Manipur, fronterizo con Birmania, estallaron el miércoles, después de que una manifestación de comunidades tribales derivaron en disturbios.
El ejército desplegó miles de soldados y ordenó disparar en "casos extremos". Las autoridades impusieron un toque de queda y cortaron el acceso a internet.
No se señaló ningún incidente grave la noche del sábado y se levantó el toque de queda en Churachandpur, una de las zonas donde la tensión era más fuerte, señaló el ejército en un comunicado.
"En total, 23.000 civiles fueron socorridos y transferidos a nuestras bases de operaciones o cuarteles militares", añadió.
Las autoridades no han comunicado ningún balance oficial, pero las morgues de los hospitales de Imphal, la capital del estado, y de Churachandpur contaron 54 víctimas fatales.
El remoto estado de Manipur ha sufrido durante décadas tensiones que implican a grupos étnicos y separatistas.
La región alberga decenas de grupos tribales y guerrilleros cuyas reivindicaciones van desde una mayor autonomía hasta la secesión del resto de India.