Por Janeth Morales
Sicólogas educativas advierten la importancia de la detección oportuna de trastornos depresivos que pudieran desencadenar ideas suicidas en niñas, niños, adolescentes y jóvenes.
“Hay chiquitos que te dicen que quisieran irse con su abuelito al cielo y ya no quieren estar aquí; hay muchas cosas tristes que están viviendo muchos niños y es necesario enseñarles a expresar sus emociones”, indicó Ana Laura España, directora de sicología educativa en la Asociación de Sicólogos Profesionales para el Bienestar Social.
Ante el regreso a clases presenciales, dichas especialistas sugieren la capacitación inmediata de la comunidad escolar para detectar cambios que indican problemas de salud mental como incapacidad para convivir y socializar al presentar emociones de tristeza e irritabilidad.
Aseguraron que la pandemia trajo consigo problemas con la salud mental tales como la depresión, especialmente, en edades escolares, derivado del distanciamiento social y las posibles violencias que se pudieron haber enfrentado, tanto en el hogar como en las escuelas.
La directora de sicología educativa indicó que los primeros días del regreso a clases presenciales es necesaria la contención y el aliento entre toda la comunidad escolar, especialmente hacia el alumnado.
Señaló que la capacitación a docentes, administrativos, personal de apoyo y padres de familia deberá ser en torno a la detección oportuna de factores que indiquen alguna alteración en el niño, niña y adolescente, así como entre los mismos docentes.
Durante la ponencia Depresión en el contexto escolar, trascendió la importancia de que el entorno escolar detecte los principales síntomas de la depresión como fatiga o pérdida de energía, falta de interés en actividades y sentimiento de tristeza persistente, de inmediato, para evitar que el problema se agudice.
Además, en el caso de niños, niñas y adolescentes es más frecuente la presencia de irritabilidad, así como el aumento o disminución del apetito y peso, disminución en la capacidad de concentrarse, alteraciones en el sueño y, en ocasiones, pueden presentar pensamientos suicidas.
En caso de que en alguna institución educativa o en casa se detecte alguno o varios factores, las sicólogas recomiendan canalizar a la persona con algún especialista para que otorgue el diagnóstico de la situación.